En 1960 se emprendió la tarea de ampliar el santuario. Aprovechando un patio interior existente entre residencia e iglesia, se construyó, adosada a ésta, una capilla, que debajo lleva un amplio salón. Mide 24 x 12 metros.
Es obra de los arquitectos José Mª Ledesma y Alfredo Ramón Laca, y de la empresa Agromán. La obra finaliza en 1961. Su estilo es de un neo‑románico moderno y libre.
En el ábside pueden contemplarse tres vidrieras. La central representa la Coronación de Nuestra Señora, de Velázquez. Las dos laterales, a dos santos redentoristas: San Clemente MI. Hofbauer y San Gerardo Mª Mayela. Joya de la capilla es el sagrario, obra de los talleres «Granda». En él se invirtieron 35 kilos de plata, bañada con oro de ley, 32 esmaltes y numerosas joyas y piedras preciosas.
En el muro lateral hay ocho grandes vidrieras de 9 x 3 m., realizadas también por la empresa "Maumejean". Cada una representa tres escenas de la historia de la Virgen del Perpetuo Socorro y de los misterios del rosario: gozosos, dolorosos y gloriosos.
Se completa el número quince de los tres misterios con la vidriera central de la Coronación de Nuestra Señora y dos colaterales en el presbiterio que representan la Visitación de María a su prima Santa Isabel y la Asunción de la Virgen María a los cielos.